ENTREVISTA EN LA PÁGINA DEL DISEÑADOR, DIARIO LA SEGUNDA


—¿Cómo es tu clienta?
—Mujeres interesantes, a quienes les llama la atención lo que está pasando en el mundo. Abogadas, periodistas, profesoras, ingenieras, etcétera. La edad es indefinible.
—Tu estilo en 3 palabras:
—Vestuario, arte, textil.
—El invierno 2012 es:
—Ya estoy trabajando en el invierno 2013. Se viene con cortes inspirados en la vanguardia del diseño de Oriente, con las texturas jugadas de la lana artesanal chilena y los colores del puerto de Valparaíso.
—Un color indispensable:
—Turquesa.
—Nunca:
—Minimalista.
—Siempre:
—Porteña.
—¿Qué te obsesiona?
—La lana de oveja artesanal, pero la verdaderamente artesanal: natural, irregular, imperfecta, hecha en el campo chileno.
—¿Qué te da vergüenza ajena?
—La copia, la mentira, la masificación.
—¿Cuál es tu placer culpable a la hora de vestirte?
—No puedo evitar combinar zapato y cartera al estilo mamá de los 80. Sé que pasó de moda hace muuuchos años, ¡¡pero a mí me encanta!!
—¿Cuál es un must a la hora de elegir un vestido de noche?
—Que te sientas cómoda, que te sientas bella y que la confección del vestido elegido sea perfecta. Y ojalá que el vestido elegido no sea negro, porque llegando al lugar donde vayas, seguro que vas a pensar, ¡cómo puedo ser igual de fome que todas las demás!
—¿Qué mañas eres capaz de reconocer?
—Mi mano derecha no tolera ningún accesorio (anillos, pulseras); en cambio, mi mano izquierda los ama.
—¿Cuál es tu mayor debilidad?
—El corte delos vestidos de los años 50. No lo puedo evitar, ¡los amo!
—¿Qué debiera existir sí o sí en el clóset de la mujer chilena?
—Alguna pieza de joya de autor, porque en Chile sobran los buenos orfebres; algún chal, poncho o abrigo de pelo de alpaca o lana chilena, porque son materialidades nacionales de altísima calidad y que podemos adquirir sin dificultad (la que quiera algún diseño completamente original, me puede contactar… jejeje); y un buen par de calzado en cuero 100% natural. Gracias a Dios, en los últimos cinco años tenemos varias marcas nacionales con una factura y línea de diseño que no tienen nada que envidiarles a países vecinos.
—¿Qué debe desaparecer de una buena vez?

—En cuanto a vestuario, no creo que nada deba ser “desaparecible”; el problema siempre es la combinación de los elementos o la saturación de estos.
—¿Cuál es el pecado capital a la hora de vestirse de la mujer chilena?
—Vestirse tipo vitrina o catálogo de revista, sin personalidad, sin ningún toque que la distinga de la de al lado, fome fome, en resumen… beige.
—¿A quiénes tenemos que mirar cómo se visten?
—A los blogs de tendencias nacionales. Los jóvenes chilenos ya tienen una mirada global de la moda que es una excelente referencia para saber lo que se está llevando y no quedar en el pasado.

La Página del Diseñador, Diario La Segunda, 21 de Julio 2012.